lunes, 23 de octubre de 2006

Medios: 24

¿En qué momento dejó Kiefer Sutherland de hacer experimentos científicos como estudiante de medicina y se convirtió en un agente de seguridad nacional?
Muchos habrán visto esta serie. Jack Bauer es un agente de la CTU (Counter-Terrorist Unit), dependencia del gobierno yankee para la detección y prevención de actos terroristas en su país. Claro que no es exactamente el Estados Unidos que está sobre México: en éste, el presidente es negro, y constantemente hay algún árabe que quiere detonar un arma nuclear en suelo norteamericano. La verdad es que no va a haber un presidente negro en Estados Unidos mientras el partido republicano siga en el poder y lo que gobierne sea la moral del WASP (White Anglo-Saxon Protestant): ultraconservadora, racista, neoliberal y puritana. En cuanto a los árabes detonando nukes, ¡que Alah esté con ustedes!

El formato. Toda la acción de cada temporada se desarrolla "en 24 horas". Como línea dramática es excelente, pues mantiene la tensión y el suspenso todo el tiempo, uno no quiere perderse ni un minuto (el tiempo cobra muchísima importancia), sin embargo, tiene la ventaja de que puede uno llegar a medio programa, a media temporada, y conectarse con la trama en pocos momentos, porque la línea general es bastante simple: unos terroristas árabes amenazan la seguridad nacional, Jack Bauer hará todo lo posible por detenerlos; habrá obstáculos internos (como considerar los derechos humanos o la diplomacia internacional), pero a Bauer le importan los fines, no los medios.
El tono. Todo el tiempo hay situaciones críticas: hay que interrogar a un testigo que se está muriendo, atrapar a un terrorista con bomba en una escuela (con todo y niños), volar una avioneta con un arma nuclear activada, etc. La tensión es constante, y Jack Bauer nunca come ni duerme: no se puede descuidar ni un momento. Nunca se da una situación humorística o sexual. Cualquier ser humano sufriría un colapso nervioso en el capítulo siete, pero no Jack Bauer.
El tiempo. En unos pocos segundos se mandan cientos de correos a CTU y un gordo identifica al contacto chino que mandó los planos del chip. No existe el tráfico: en doce minutos, Cloe sale de CTU, llega a los suburbios a la casa de una informante, es atacada por un tipo armado, sale de la casa, se encierra en un auto, pide a CTU la combinación de la reja de protección del carro, se la dan, saca el arma que estaba en el asiento de atrás, sale del carro, mata al terrorista, llega el apoyo, resuelve el problema mientras la examina el médico y regresa a CTU. Todo en doce minutos. Evidentemente, esto es imposible hasta para un gringo, pero esta distorsión temporal es igual a la de Star Wars (por ejemplo, Luke recibe todo su entrenamiento en Dagobah mientras Han y los otros pasan un rato escondidos en un asteroide), y de hecho es una técnica narrativa. Hay una incongruencia entre el tiempo declarado en la anécdota y el tiempo real que toman las cosas, igual que en los sueños. El espectador está en un espacio con características del sueño.
La moraleja. Tras resolver definitivamente el problema, Jack Bauer finalmente se echa a llorar en su camioneta, pero suena el teléfono... Bauer se suena los mocos, contesta, escucha instrucciones y dice "I'm on my way"... luego los créditos de fin de temporada. Un amigo de Bauer se atora en la mano un dispositivo químico para evitar que se lo lleve el terrorista (el dispositivo estallará en dos minutos); la única solución es cortarle la mano con un hacha. La hija psicótica de una mujer de CTU tiene un brote a mitad de una situación crítica de seguridad nacional... la mujer tiene que descuidar a la hija por el trabajo; la hija se suicida; la mujer sigue trabajando. Situaciones como estas nos muestran un mensaje de la serie para el ciudadano común: una vez que se ha identificado psicológicamente con Jack Bauer (y ¿cómo no?, si es guapo, inteligente, fuerte, trabaja en CTU y trae una camioneta como la que usted quiere), es claro que para Jack (y para usted) lo más importante es el deber, olvídese de los sentimientos, de su hija loca, de la decencia, de la mano de su amigo. Bauer entra a un quirófano para exigir armado a los médicos que atiendan al testigo moribundoque trae, en lugar del sujeto que están atendiendo, aunque éste le haya salvado la vida, pues la información del chino puede ser vital para salvar al mundo. Usted es Jack Bauer y su trabajo es más importante que todo lo demás. Sea como Jack Bauer al generar ingresos para su empresa.
Otras moralejas. Nunca en mi vida he visto a un terrorista. Para mí son casi lo mismo que Yoda, los veo nada más en la tele o en juegos de computadora, a veces en las noticias. A veces matan gente, es cierto, pero ¿no será mucho mayor el número de gente que se muere de hambre todos los días? Terroristas... El otro día, una chava habló a CTU para decir que sospechaba que su novio estaba conectado con "grupos fundamentalistas", y Cloe le preguntó: "¿Terroristas?". O sea, como si todos los fundamentalistas fueran automáticamente terroristas, o como si los fundamentalistas judeo-cristianos no fueran igual de terroristas (ataques a poblaciones civiles en el Líbano, el Ku-Klux-Klan quemando negros). Pero se sabe que esta cultura de delación no es ficción: la US Air Force of Special Investigations tiene un programa en el que se les pide a los ciudadanos que reporten actividades "sospechosas", por ejemplo, alguien dibujando diagramas o haciendo preguntas sobre las bases militares, o un conductor que se presenta ante una caseta de vigilancia y quiere entrar sin ID, o dice que está perdido. Vigilancia ciudadana, igualito que en los peores tiempos de la URSS, como en 1984, con las cámaras y todo. El único terrorista es el régimen (ojo, no el gobierno), que infunde el terror entre sus ciudadanos.
El discurso de un lider terrorista dice que la bomba que harán explotar es un castigo por su ignorancia, por hacerle caso a su gobierno que sigue de imperialista e intervencionista. Claro, todos los gringos lo han escuchado, a algunos les vale, a otros no. Pero, ¿cómo entender un mensaje así en un programa profundamente americano? ¿Se estarán autodestruyendo, como algunos dicen que pasó con las torres gemelas? Para nada. La serie "24" no la inventó el gobierno ni el anti-gobierno, la inventó la corporación mediática Fox, parte clave de la maquinaria neoliberal, pues su misión es ayudar a la "mano invisible" (¿será invisible la mano de Carlos Slim en México, o se le embarrará de mierda cuando se limpia el culo como a su más humilde esclavo?) con la propaganda y el adoctrinamiento. El gobierno y sus gorilas marines son los que invaden los países, pero lo hacen por la presión de los grandes inversionistas, los dueños del capital, las corporaciones, etc. El ideal neoliberal es que el gobierno intervenga lo menos posible en los asuntos del mercado... más ideal sería tener el pie en el cuello del gobierno, ¿no lo creen así, señor Coppel, señor Azcárraga, señor Salinas?